2006-09-21

EL DISCURSO DEL ZORRO BENEDICTO RATZINGER

Benedicto XVI el Maquiavélico

Félix Monasterio-Huelin Maciá

Rebelión

¡Aclárate papa, papa, papageno, que si suena la flauta mágica es para espantar a las fieras del bosque, no como reclamo neoliberal para la venta de pajarillos!¡Aclárate papa, papa, papageno, que a la juventud no se la colma llenando su cabeza de pájaros!¡Aclárate papa, papa, papageno,que no se lanzan palabras al aire por si la flauta suena!

Leyendo el texto íntegro de Benedicto XVI http://www.rebelion.org/noticia.php?id=37808 "Texto íntegro del discurso de Benedicto XVI, titulado "Fe, razón y universidad. Recuerdos y reflexiones", generador de la polémica con el mundo musulmán ". (Lo que a continuación se encuentra entrecomillado proviene literalmente de este artículo, aunque no se diga explícitamente. Cuando no es así se aclara con una referencia.)

""No actuar razonablemente (con 'logos') es contrario a la naturaleza de Dios" dijo Manuel II, de acuerdo con el entendimiento cristiano de Dios, en respuesta a su interlocutor persa. En el diálogo de las culturas invitamos a nuestros interlocutores a encontrar este gran 'logos', esta amplitud de la razón. Es la gran tarea de la universidad redescubrirlo constantemente. "

Aquí queda patente que el Papa se pone del lado de Manuel II, ya que éste habla " de acuerdo con el entendimiento cristiano de Dios".

1. Oriente y Occidente. La modernidad según el Papa.

"Occidente ha estado en peligro durante mucho tiempo a causa de esta aversión, en la que se basa su racionalidad, y por lo tanto sólo puede sufrir grandemente."

¡Ah, se trata de Occidente! Vaya, creí que se trataba de la Cristiandad... Resulta que en Occidente hay cristianos, musulamanes, judíos, budistas y tantos otros.

¿No se trata realmente de defender a la cristiandad, utilizando a la ciencia como el producto más vendible, diciendo que la ciencia deriva de la esencia del cristianismo, mientras que la guerra de la esencia del islamismo? ¿No es acaso su intervención una yihad cristiana, es decir un esfuerzo por defender el cristianismo, conservando esa teoría del sujeto pasivo frente al sujeto activo del islamismo y de la teología de la liberación? ¿No se trata también de oponerse a cualquier materialismo y en especial a los que dicen que el desarrollo de la sociedad es un proceso sin sujeto, como dice Althusser que defiende Marx, de oponerse a su materialismo del encuentro, y a todas las teorías de la emancipación?

Ratzinger dijo en otra ocasión:"La construcción social del Islam es teocrática, por tanto, monista y no dualista. El dualismo, que es la condición previa de la libertad, presupone a su vez la lógica cristiana. Desde el punto de vista práctico, ello significa que sólo donde se preserva el dualismo de Iglesia y Estado, de instancia sagrada y política, se asientan las condiciones fundamentales para la libertad. Allí donde la Iglesia se convierte a sí misma en Estado, la libertad se pierde. Pero también donde la Iglesia es suprimida como instancia pública y públicamente relevante, decae la libertad, porque el Estado reclama de nuevo para sí el fundamento de la ética." (sacado de http://www.conoze.com/doc.php?doc=1512 ,página cristiana cuya sección "Ciencia y Fe" comienza así: "Poupard, que durante diez años fue rector de una universidad católica de París, dijo en Murcia que las universidades son «como el laboratorio donde se lleva a cabo el diálogo entre la fe y la cultura, entre la ciencia y la fe.". Básicamente es así como termina el discurso actual del Papa en Ratisbona.)

Es curioso constatar cómo el discurso del Papa sobre la libertad coincide con el de la derecha, recayendo en la cuestión mítica del dualismo, y cómo nuevamente se nos recuerda a la izquierda lo importante que es defender un monismo, un materialismo, un ateísmo o como cada cual quiera ver el anti-dualismo, el anti-idealismo. El atrevimiento de este Papa no tiene límites. Es patético observar cómo cada fracaso de la Iglesia Católica (la Revolución Francesa) se convierte por obra y gracia de una reinterpretación del cristianismo en éxito. Está claro que a pesar de lograr con malas artes que Mussollini les regalara el territorio del Vaticano, queda claro que para el Papa no es un estado, sino posiblemente El Estado que está por encima de los estados-nación, y en consecuencia ya no se practica una teocracia, sino una división de poderes garante de la libertad dualista: Cuerpo en cada estado-nación y Alma en el Vaticano. Naturalmente las universidades, los colegios que haya en el Cuerpo no deben olvidar que hay un Alma, y así razón y fe correrán paralelos, juntos pero no revueltos, hacia un futuro de concordia universal. Parece lógico que se oponga a cualquier intento de que el Cuerpo sea laico, y se enseñe a los niños cómo ser un buen ciudadano en vez de enseñarles cómo ser un buen cristiano. Lo que se contradice en este dualismo es que ser bueno no es una cuestión de salud del Cuerpo, sino de sumisión y dependencia del Cuerpo frente al Alma. Que la salud del Cuerpo dependa del Alma es un atentado a la biología, la psicología y a las ciencias sociales. Es un atentado a la racionalidad científica.

"Este es un estado peligroso para los asuntos de la humanidad, como podemos ver en las distintas patologías de la religión y la razón que necesariamente emergen cuando la razón es tan reducida que las preguntas de la religión y la ética ya no interesan. Intentos de construir la ética a partir de las reglas de la evolución o la psicología terminan siendo simplemente inadecuados."

¿Inadecuados para qué, para quiénes? Rajoy se sabe las respuestas al dedillo.

2. El yihad.

"En el séptimo coloquio (controversia) editado por el profesor Khoury, el emperador toca el tema de la "yihad" (guerra santa)."

Puede observarse que yihad es traducido como guerra santa, lo cual no deja de sorprenderme al oirlo en boca de un teólogo, que ejerce de Obispo de Roma y Papa de la Iglesia Católica.

(En http://es.wikipedia.org/wiki/Yihad se leee: "yihad cuya traducción literal es esfuerzo... Es importante entender que el Islam, al contrario que otras religiones, no predica la pasividad ni la mansedumbre sino la acción como vía para lograr los valores a los que aspira. Por eso el yihad es considerado por muchos como el sexto pilar del Islam... Ahora bien, decir que se trata de "defender el Islam" es, naturalmente, muy ambiguo tanto en lo referente a los fines como a los medios...")

3. La Intencionalidad.

Dadas las implicaciones sociales de las palabras de este Papa no es de extrañar que surja la pregunta de su intencionalidad en cuanto a sus consecuencias.

El Papa se retracta de su discurso de Ratisbona y muestra un «gran pesar» (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=37768) es un artículo informativo, donde se lee: "El primer ministro del Gobierno palestino de Hamas condenó la quema de iglesias.".

¿Era este el objetivo del Papa, provocar, como dicen algunos sectores de la derecha católica, a los clérigos musulmanes (aunque el primer ministro no sea un clérigo musulman) a que condenen la violencia fundamentalista islámica? Si así fuese, se estaría admitiendo que la actual violencia es islamista, y por otro se estaría utilizando el recurso de un discurso del que se pueden prever las consecuencias para un fin contrario. Quiero decir que si ahora el Papa simplemente se siente rammaricato, apesadumbrado, habiendo provocado la ira de algunos, o es un cínico o considera un mal menor estas consecuencias. Es posible que haya también que leer que previendo las consecuencias se corrobora su afirmación de que el islamismo es en sí mismo violento. ¿Este Papa es maquiavélico? ¿El fin justifica los medios para el actual jefe del estado vaticano? Puede que haya que ver este asunto como una cuestión del nuevo estilo catolicista, que en términos de Maquiavelo sería: el Príncipe ha de ser profundamente malo, pero debe parecer claramente bueno.

El Papa y el Islam (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=37798) "De haber sido intencional esa lanzada significaría un violento retroceso en la estrategia de aproximación que lleva varias décadas de implantación en el catolicismo romano, lo cual no es probable."

Lisandro Otero no nos convence aunque sea el Presidente de la Academia de la Lengua de Cuba, y aunque deje la cuestión en manos de la probabilidad. Sí convence el adjetivo de "violento" y queda abierta la sugerencia de que la probabilidad recaiga en la palabra "aproximación" y no en la de "retroceso". Ordenando la frase así, convence un poquito más.

Dice el Papa en el texto en cuestión: "Sólo así podemos lograr ese diálogo genuino de culturas y religiones que necesitamos con urgencia hoy. En el mundo occidental se sostiene ampliamente que sólo la razón positivista y las formas de la filosofía basadas en ella son universalmente válidas. Incluso las culturas profundamente religiosas ven esta exclusión de lo divino de la universalidad de la razón como un ataque a sus más profundas convicciones. Una razón que es sorda a lo divino y que relega la religión al espectro de las subculturas es incapaz de entrar al diálogo con las culturas."

Busca el Papa, según él mismo dice, el diálogo genuino. Nuevamente los adjetivos propios de que hay exclusiones: "genuino". ¿A quiénes se está aproximando? Es el artículo de Otero una lectura pobre sobre la estrategia de aproximación del catolicismo romano, puesto que no atiende a lo que excluye por mucho que Otero diga que "La actual tribulación del mundo árabe ha sido precipitada por la acción conjunta de Estados Unidos e Israel que han impuesto mutilación de territorios, guerras locales, desmembramiento de estados y una economía permanente de guerra para controlar sus recursos energéticos.". Creo recordar que el marxismo hace suya esa famosa frase de que la religión es el opio del pueblo. Y confundir cultura con religión es una barbaridad interesada, que carece de legitimidad académica.

Los insultos papales. Una Provocación bávara (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=37820) "Elegir una cita de Manuel II Paleólogos, que no fue el más inteligente de los emperadores bizantinos, fue algo inapropiado, especialmente en vísperas de su visita a Turquía. Hubiera podido encontrar citas más efectivas y mucho más próximas a él pero, quizás, fue su tributo especial a Oriana Fallaci. Quizás."

Tariq Ali, lanza este quizás, porque Oriana Fallaci "desde que rompió su silencio con La rabia y el orgullo, ha dedicado sus obras «a defender la civilización occidental, no frente a la musulmana, sino frente al fundamentalismo islámico». En opinión de la escritora, existe un alarmante proceso de islamización de Occidente, al que denomina Eurabia, proceso que, en su opinión, habría contado con la complicidad de la izquierda europea." (http://es.wikipedia.org/wiki/Oriana_Fallaci ).

Tariq Ali deja abierta la interpretación del encuentro de religiones, pero no se engaña en lo que parece más razonable admitir: "El mundo islámico, con dos de sus países- Iraq y Afganistán- ocupados directamente por tropas occidentales, no necesita que le recuerden el lenguaje de las Cruzadas. En un mundo neo-liberal que sufre degradación medioambiental, pobreza, hambre y represión, convertido en un 'planeta de suburbios' (en la expresiva frase de Mike Davis), el Papa elige insultar al fundador de una religión rival.".

Posiblemente el Papa elige insultar porque se niega a reconocer el fondo de los problemas o porque simplemente comparte la idea iluminada de Bush de que robar al pueblo musulmán no es robar a nadie sino coger lo que Dios nos ha prometido. Pero esto último no es probable ya que el Papa no acepta la guerra preventiva. Probablemente sea la primera hipótesis la que más se acerque a la verdad, quizás en consonancia con esa sumisión cristiana de dar al césar lo que es del césar y a dios lo que es de dios. En consecuencia, nada más lejos de la posibilidad de alimentar los deseos de emancipación de los pueblos, nada más lejos de interpretar la figura de Jesús como la de un rebelde o un revolucionario, como defiende Hugo Chávez. Una consecuencia obvia es que no podemos esperar que el Papa actual se ponga del lado de los pobres. Creo que le basta y le sobra con imaginarse que es el Príncipe de Occidente, que junto con el Emperador pueden poner un poco de orden en este mundo, o como dice Tariq Ali ""Para estar seguros de tener la razón siempre", dijo el fundador de los jesuitas, Ignacio de Loyola, "deberíamos cumplir con el principio de que lo que veo como blanco debería creer que es negro si la jerarquía de la iglesia así lo indica." Hoy la mayoría de los obispos católicos en occidente (incluido el bávaro del Vaticano) y los políticos de centro izquierda y centro derecha adoran al verdadero Papa que vive en la Casa Blanca y les dice cuándo lo negro es blanco.".

El césar y dios juegan a las cartas y a la cábala del neolenguaje orweliano poniendo cara jesuítica.

4. La conversión.

El contexto de sus palabras más polémicas gira alrededor de su oposición a "la coversión mediante la violencia". Resulta curioso este contexto cuando se enlaza con el contexto social actual. Si se habla de terrorismo islámico, ¿debemos entender que lo que pretenden los musulmanes es convertir a los occidentales-cristianos al Islam? Hace falta ser retorcido para imaginar siquiera que este es el objetivo de las matanzas de Atocha y de Manhattan. No obstante el mismo Aznar al salir del gobierno se puso a bramar esta tesis en una universidad usamericana, añadiendo que lo que buscan es, poco menos, que tomar al asalto la alhambra de Granada.

La forma del texto del Papa es, hablando con propiedad, la de un estudiante de bachillerato que cita de corrido una historia de la filosofía completamente sesgada y aprendida como una narración lineal, cuyo orden parece lógico y autocontenido. Lo insoportable de este texto es que desatiende los hechos históricos, escoge las citas que más le interesan para defender una curisosa tesis en defensa de la modernidad, y saca alegremente conclusiones que ni el más elemental sentido común podría aceptar. Es en este último sentido que el escrito del Papa debe inscribirse entre los Escritos Esotéricos de la Posmodernidad Reaccionaria.

5. Razón y fe.

Dice: "En el fondo, se trata del encuentro entre fe y razón, entre auténtica ilustración y religión."

Hay que resaltar el adjetivo "auténtica" para poder seguir leyendo, y posiblemente para comprender que si de un plumazo elimina a tantos ilustrados, es porque no merecen ser incluidos entre los auténticos. Para saber quiénes son los auténticos habrá que remitirse al Santo Oficio (ahora llamado Congregación para la Doctrina de la Fe), cuya función se definió en 1988: "«la tarea propia de la Congregación para la Doctrina de la Fe es promover y tutelar la doctrina de la fe y la moral en todo el mundo católico. Por esta razón, todo aquello que, de alguna manera toca este tema, cae bajo su competencia»". La Congregación se dedica a "difundir la sólida doctrina y defender aquellos puntos de la tradición cristiana que parecen estar en peligro, como consecuencia de doctrinas nuevas no aceptables." Y recuérdese que Ratzinger fue su Prefecto durante el papado anterior. Es de suponer que los criterios que haya seguido el Santo Oficio en el 2004 sean los mismos que deban aplicarse en la actualidad, lo que quiere decir que los adjetivos que se van encontrando en el texto analizado, como los de "auténtico", "genuino" sean claramente los de la Congregación de marras. Así el feminismo, por poner un simple pero llamativo ejemplo, no entraría entre los auténticos (el Cuerpo de la mujer no cabe en el Alma). La libertad de elección al aborto tampoco sería una genuina libertad, y así sucesivamente.

"En contraposición, la fe de la Iglesia se ha atenido siempre a la convicción de que entre Dios y nosotros, entre su eterno Espíritu creador y nuestra razón creada, existe una verdadera analogía, en la que ciertamente las desemejanzas son infinitamente más grandes que las semejanzas --como dice el Concilio Lateranense IV en 1215--, pero que no por ello se llegan a abolir la analogía y su lenguaje."

En primer lugar nos suelta como si fuese una evidencia, "la razón creada", un creacionismo de la razón, que subyacentemente no niega la teoría de la evolución, excepto en el punto decisivo en que Dios asigna, concede, racionalidad al ser humano. Habría que concluir que de ser éste un salvaje evolucionado pasa, por acción divina, a ser un ser racional, y que esta racionalidad recibe algo de la racionalidad divina, y ambas son análogas pero infinitamente disímiles. (Este párrafo tiene mucha miga, pero está claro que apunta a conceptos como perfección/imperfección, sabiduría/ignorancia, etc. y no cabe duda de que prepara el camino para un cierto modelo de Dios...)

Esto se dice en el contexto de una crítica al voluntarismo de la fe (y como se señala en el texto colateralmente es contra el "intelectualismo agustiniano y tomista, [que] con Juan Duns Escoto comenzó un planteamiento voluntarista..."): "Dios no se hace más divino por el hecho de que lo alejemos en un voluntarismo puro e impenetrable, sino que el Dios verdaderamente divino es ese Dios que se ha mostrado como el "logos"".

"El sujeto decide entonces, basándose en su experiencia, lo que considera que es materia de la religión, y la conciencia subjetiva se convierte en el único árbitro de lo que es ético. De esta manera, sin embargo, la ética y la religión pierden su poder de crear una comunidad y se convierten en un asunto completamente personal. Este es un estado peligroso para los asuntos de la humanidad..."

Aquí responde a uno de los criterios de la laicicidad en cuanto a que la religión es una cuestión de fe personal. Ve un peligro para la humanidad. Confunde sistemáticamente religión y ética, por lo que se contradice con la defensa de la modernidad, y si no es así es porque dogmáticamente subyacen los adjetivos del Santo Oficio.

"Sólo lo lograremos si la razón y la fe avanzan juntas de un modo nuevo, si superamos la limitación impuesta por la razón misma a lo que es empíricamente verificable, y si una vez más generamos nuevos horizontes."

Esta proclama Razón-Fe, Cuerpo-Alma, Estados-Vaticano, etc. está en peligro, lo que debiera constituir para la mayoría un regocijo, más que una paranoia apocalíptica. Una de las actuales tareas más urgentes para la filosofía es el desarrollo de una ética sin religión, sin dioses creadores, una ética que nos permita vivir en colectividad sin necesidad de recurrir a un sentido trascendente de la vida. Esto sólo puede lograrse erradicando el capitalismo y sobre la base de un socialismo. Hay que lograr que la comunidad no dependa de la ética sino la ética de la comunidad. Actuar al revés, que es justamente lo que nos trata de imponer Ratzinger, es actuar de mala fe. Por lo que estoy viendo en este discurso, a la Iglesia y sus acólitos, sólo les quedan sus propiedades y el uso de la violencia (como señala Otero), porque ya han perdido toda clase de argumentos, ya sólo les queda refugiarse en el cinismo. Demos la enhorabuena y que mis ojos que ven el declive vean también su extinción.

6. La razón científica.

"Al mismo tiempo, como he tratado de demostrar, la razón científica moderna con sus elementos intrínsecamente platónicos genera una pregunta que va más allá de sí misma, de sus posibilidades y de su metodología. La razón científica moderna tiene que aceptar la estructura racional de la materia y su correspondencia entre nuestro espíritu y las estructuras racionales que actúan en la naturaleza como un dato de hecho, en el que se basa su metodología."

Aquí queda claro que Ratzinger trataba de demostrar algo: los científicos tienen que reconocer que no se puede ser materialista sino espiritualista (o idealista) sin contradecirse, ya que su propia metodología así lo contempla.

Recuerdo que el anterior Papa tuvo una reunión con Hawking para que le explicase cuestiones de cosmología. El científico, que es ateo y un positivista recalcitrante aceptó. En su libro "la historia del tiempo" nos cuenta la anécdota de que el Papa tras oir la teoría de Big-Bang le dijo: antes del Big-Bang nosotros y después vosotros. Supongo que el Papa no hablaba en serio, dada su predisposición a rechazar la teoría de la evolución de Darwin, la teoría economico-política de Marx, la teoría del subconsciente de Freud, y todas aquellas teorías científicas (o cuasi-científicas) que andan por el mundo dando la tabarra a los fundamentos de las religiones.

¿Que la ciencia tiene elementos intrínsecamente platónicos? Si acaso podríamos decir esto de muchos científicos cuando tratan de filosofar la ciencia, precisamente cuando la entienden como lo hace el mismo Papa, es decir cuando la tesis se convierte en hipótesis, cuando se cae en el círculo vicioso platónico, cuando ya se da como verdadero que hay modelos ideales a los cuales se acomodan nuestros descubrimientos científicos. De ninguna manera la ciencia es platónica. Lo que es platónico es adoptar el punto de vista epistemológico de Platón.

El desarrollo de las ciencias en cuanto a la elaboración de leyes de la naturaleza, alimenta nuestra perplejidad y no cabe duda de que nos traslada al terreno propio de la filosofía, al terreno de las interrogaciones, a la sospecha de que el orden descubierto podría responder a un orden superior, divino y premeditado. Cuando se desatiende el sentimiento de sospecha, o dicho de otra manera, cuando ya no se sospecha sino que se afirma como una verdad lo que racionalmente debería ser una duda, es cuando la filosofía cae en la mayor de las trampas de la historia: el Cogito cartesiano de lo claro y distinto, ese pienso luego soy que ya ha sido desmontado por tantísimos filósofos.La metodología científica no es la del método cartesiano, se encuentra más cerca del método inductivo de Bacon, y en cualquier caso no sigue ningún método especial. Tan sólo tiene ciertas premisas como la de no dar por completamente cierto o válido ninguna de sus conclusiones. Ni tan siquiera puede decirse que sea de carácter hipotético puesto que esto supondría que subyace una verdad por descubrir (platonismo) o una tendencia hacia la verdad (Popper). El afan de describir la naturaleza con una sóla palabra, una sóla fórmula (la unificación de las fuerzas, la teoría de las supercuerdas, etc.), sólo se compromete, en todo caso, con la filosofía de que hay una sóla sustancia, y en definitiva con un panteísmo filosófico a la manera de Spinoza y de Einstein. Se compromete con un monismo, pero no con el dualismo cartesiano. No se compromete con ninguna racionalidad subyacente, salvo cuando ya se impone desde afuera, cuando ya se introduce subrepticiamente en la misma filosofía. Llamar Dios a esa sustancia es irrelevante, y desde luego no es el dios judeo-cristiano-musulmán.

Si fuese cierto lo que dice el Papa sobre el Islam, la religión del futuro será el islamismo, y no el cristianismo, precisamente porque la batalla en el terreno de las ideas la tienen perdida quienes buscan una razón trascendente. Bastaría con que los cristianos reflexionasen sobre la relación "razón y fe" para que se convirtiesen en masa al islamismo. Pero ya se ha encargado el Papa de decirles a estos cristianos que si así lo hacen no habrá paz sobre la Tierra. En consecuencia, según el Papa el cristiano debe elegir, entre la guerra permanente pero sin contradicciones, a una paz con una lucha interior entre razón y fe. Es lógico sospechar que vistas así las cosas se esté alimentando una guerra de religiones.

7. Programa teológico del Papa.

"Hace falta valentía para comprometer toda la amplitud de la razón y no la negación de su grandeza: este es el programa con el que la teología anclada en la fe bíblica ingresa en el debate de nuestro tiempo."

Y la lectura que yo hago: el racionalismo está caduco como motor de transformación social, y en consecuencia la Iglesia ya puede incorporarlo en su letanía reinterpretando nuevamente el cristianismo. La Historia de la Iglesia ha seguido tradicionalmente estos derroteros, y ahora no piensa cambiar, aunque para ello deba cambiar la misma historia de la modernidad ocultando el profundo sentido de los conceptos emancipatorios como paz, justicia, democracia y libertad.

¿Será este discurso una prueba más de que entramos en la posmodernidad?

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=37916

2006-09-17

FUNDAMENTALISMO CRISTIANO

FUNDAMENTALISMO

Se puede pensar que el papa se manda solo? Hasta cuando podemos pensar que la religión no es política?

Señores, señoras y porqué no infantes... Aquí y ahora: La religión es política y la política es religión.
Ya en el mundo no hay necesidad, ignorancia y miseria que justifique semejante fundamentalismo, lo que actualmente se hace es simple y pura manipulación y así caen los incautos.

Los fundamentalistas hacen política y así les va. Digamos que ante un daño mayor se elige uno menor. Si el papa se disculpa, no estaría incurriendo en la mentira?
Además en cuestión de poderes, "una disculpa piadosa" simplemente es reconocer la supremacía del poder del Islam.

Y no me digan que no se le venía venir, que eso suponga alguien que está en Argentina y que se sorprendió de la crueldad fundamentalista que se usó cuando explotó la AMIA, o cuando estallo la Embajada de Israel, de alguien que no sabe lo que son los fundamentalismos, porque vive en su burbuja, puede ser... Pero de nosotros?

El papa no habla solo, tiene una orquesta por detras... claro que por algo lo hace, entre fundamentalistas se reconocen y en algún momento como las almas cada vez son más escasas, es natural pues que entre ellos se molesten.
Así que vamos... a nadie le importa que aquí en Argentina y en América esté actuando lo mas duro del fundamentalismo católico en cuestiones que no les atañen, desde lo social y político, porqué nos va a
extrañar que la religión más fundamentalista de todas se meta con el Islam, si aquí en la época del proceso mientras estaban las botas militares algunos se ponían de acuerdo para primero pasar al paredon
todo aquello que no era católico.

Y ahora nos venimos a asombrar?

Es por eso que si bajo el dedo de Ratzinger están las
cabezas de millones de personas y todas esas personas responden al mando de Hail! Puede entonces que esas personas también esten decididas a seguirlo en su estupidez...

http://www.truthdig.com/report/item/20060916_sam_harris_rottweiler_barks/

POR LA HOMILIA QUE DIO BENEDICTO XVI EN SU VIAJE

Enojo musulmán con el Papa

A dos meses del viaje del Papa a Turquía, las críticas de Benedicto XVI a la Jihad o Guerra Santa han estremecido al mundo del Islam, que lo acusa de haber tergiversado su esencia al establecer una similitud entre su religión y la violencia. Lo que parecía un viaje placentero a sus raíces en su Baviera natal del sur de Alemania acabó generando un terremoto de declaraciones de responsables musulmanes, indignados por unos comentarios que, según ellos, avivan el desasosiego en un mundo donde consideran que ya cargan sobre sus hombros con el peso de suficientes estigmas.

Las palabras de la discordia no son cosecha del Papa, sino citas de un diálogo entre un emperador bizantino y un erudito persa del siglo XIV que Benedicto XVI tomó como referencia el martes en la universidad de Ratisbona para hacer una reflexión sobre la razón y la fe.

“Muéstrame lo nuevo que ha traído Mahoma y ahí sólo encontrarás cosas malas e inhumanas, como que ha ordenado difundir con la espada la fe que predica”, citó de una conversación entre los dos hombres sobre la relación entre la religión y la violencia. Cuando falta poco para el viaje del Santo Padre a Turquía, en noviembre, un responsable musulmán turco puso el grito en el cielo el jueves al denunciar unas declaraciones que “reflejan el odio que lleva en su corazón” y son “muy hostiles”.

Alí Bardakoglu, director del departamento de asuntos religiosos ante el gobierno turco, llegó a cuestionar la visita del Sumo Pontífice porque “no ve interés alguno para el mundo musulmán en la visita a Turquía de una persona con semejantes convicciones con respecto al Islam y su profeta”.

La respuesta de Kuwait ha sido implacable. El secretario general del partido islamista Nación Islámica, Hakem al Mutairi, instó a todos los países musulmanes a retirar a sus embajadores ante el Vaticano “hasta que el Papa se disculpe por el daño que ha causado al profeta y al Islam”.

Por su parte, la presidenta de una importante organización islámica de Estados Unidos y Canadá, la Asociación Islámica de Norteamérica (ISNA), Ingrid Mattson, tachó sus propósitos de “inexactos y oportunistas”. En Pakistán, dirigentes y analistas musulmanes estimaron que las afirmaciones eran “desafortunadas”, “lamentables” e “irresponsables”. El secretario general del Consejo Central de los Musulmanes de Alemania, Aiman Mazyek, aseguró al diario Tagesspiegel que es “difícil de creer que el Papa vea en relación con la violencia una frontera entre el Islam y el cristianismo”. Mazyek recuerda que la historia del cristianismo también ha sido sangrienta y puso como ejemplo “las cruzadas y la conversión obligatoria de judíos y musulmanes en España”. El director del Instituto de Estudios Políticos, afiliado al más institucional de los partidos islamistas paquistaníes, el Jamaat Islami, afirmó: “La actitud del Papa es muy diferente a la de su predecesor. En lugar de acercar al Islam y al cristianismo, crea tensión en las relaciones entre las dos religiones”.

Anoche, el portavoz del Vaticano padre Federico Lombardi, reaccionando a la emoción provocada en el mundo musulmán por la homilía del Papa durante su viaje a Alemania declaró: el Pontífice “quiere cultivar una actitud de respeto y diálogo hacia las otras religiones y culturas, y evidentemente también hacia el Islam”.

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17.09.06, Assyrian International News Agency (IQ)

Fuentes del hospital Yarmouk, en Bagdad anunciaron este sábado la muerte del segundo sirio cristiano, a causa de las multiples heridas por arma blanca recibidas en el mercado sirio del distrito de Doura.

Esta muerte se produce un día después del ataque a la iglesia católica siria del distrito de Ashar, en el centro de Basora, donde también fue asesinada otra persona.

Los líderes cristianos en Iraq han pedido a sus parroquianos que extremen las medidas de precaución, y procuren no salir de sus domicilios, porque un nuevo grupo denominado "las jóvenes brigadas del Islam fundamental" ha distribuido panfletos anunciando la ejecución de todos los cristianos iraquies en tres días si en Papa no pide disculpas.

Según las noticias de la página web del grupo insurgente islammemo.cc el obispo de la iglesia católica siria ha solicitado protección al gobierno central de Iraq y a las fuerzas de la coalición, con la esperanza de que intervengan a favor de los nativos cristianos.

2006-09-13

CUANDO SE HACE POLITICA DE MISERIA HUMANA, COMENZANDO POR LOS DEL VATICANO Y SUS SECUASES, SON TODOS "DIVINOS",

ATEOPOLIS - POR UN MUNDO LIBRE DE INFLUENCIAS RELIGIOSAS
La Compulsión por el Poder

La Iglesia Católica ha perdido el rumbo. Da palos de ciego en todas direcciones sin ningún sentido ni, mucho menos, moderación. Aunque pareciera tener propósitos nobles y claros respecto a las dos materias que son su eje en la actualidad -educación y sexualidad-, la verdad es muy diferente y la parte del iceberg que no vemos resulta la más interesante y, a la vez, la más turbia.
Afirmándose una verdad evidente, tal como es la pérdida de valores y el debilitamiento moral, la Iglesia intenta hacerse dueña de la educación en occidente, con la finalidad de concientizar para su propio beneficio. Los conflictos morales que vivimos hoy en día no tienen relación con cuestiones religiosas, sino que son consecuencia del vandalismo económico propiciado por un sistema mercantilista abusivo y, en gran medida, descontrolado, que considera al ser humano un mero perno en el “sistema”, embrujándolo con una propaganda hedonista y superficial.
En materia sexual, la Iglesia continúa promoviendo principios obsoletos, carentes de sentido histórico y sin ninguna relación con la realidad. Los intentos por promover la abstinencia como único medio de controlar la natalidad y las enfermedades sexuales, demuestra que su visión del mundo carece de todo valor e importancia. Más aún, cuando dicha abstinencia ni siquiera es respetada por los propios sacerdotes, actores de los más grandes escándalos sexuales de nuestro tiempo.
Pero va mucho más allá el asunto, por debajo de la línea de flotación de ese barco milenario que comienza a hacer agua y que, en su desesperación, intenta encontrar un dique seco donde poder hacer reparaciones, sin darse cuenta que el barco ya está podrido.
Los intentos por prohibir la película “El Código Da Vinci” -muy mediocre por cierto-, así como la producción Conspiracy of silence , demuestra lo que decimos; están fuera de tiempo. Pero eso es solo el aspecto más llamativo. Aspectos que no se conocen de la intromisión de la Iglesia en otros ámbitos pasan casi desapercibidos, tales como los intentos por evitar, por todos los medios, la difusión de las teorías evolutivas en la educación. De partida, esta es materia prohibida en los colegios religiosos. Todavía más; al parecer el Vaticano estaría a punto de rechazar, incluso, la teoría del Diseño Inteligente, por ser demasiado parecida a la teoría darwiniana. Esto significa volver al Creacionismo medievalista, retrotrayendo el conocimiento en mil años.
Ante tanta incongruencia y desatinos, algunos sectores de la Iglesia comienzan a preocuparse. Especialmente, porque ven un recrudecimiento en los recursos del prohibicionismo, la condenación y el miedo. Incluso el propio Papa ha declarado que “un Estado agnóstico en relación con Dios, que establece el derecho sólo a partir de la mayoría, tiende a reducirse desde su interior a una asociación delictiva...”. Dicho en forma simple, todo aquellos que no aceptamos las imposiciones políticas de la Iglesia somos “delincuentes”.
Y no voy a mencionar aquí los oscuros negocios financieros del Banco Vaticano, ni las intrigas internacionales destinadas a acallar las voces más connotadas en contra de la doctrina. ¡Cómo deben envidiar a sus colegas musulmanes que no trepidan en degollar a sus adversarios!
Sin duda que la Iglesia está en su peor momento, pero como todo animal herido, es tremendamente peligroso. La única forma de combatirla en este momento es poniendo todo nuestro empeño en evitar que sus injerencias en la vida civil tengan efecto. Hemos visto como se ha aprobado el divorcio, el aborto en algunos países, el matrimonio de homosexuales y otras normas contrarias a lo propuesto por la religión. Faltan aún algunas libertades necesarias para excluirla completamente de nuestro panorama político-social. Y sin duda que ella luchará encarnizadamente.
Su gran problema radica en sus prejuicios: no intentan siquiera analizar los problemas humanos desde la perspectiva de los problemas mismos, sino a través de sus dogmas. Esto la ha llevado a permanentes errores de apreciación y juicio, además que causar grave daño a las sociedades donde ha logrado imponer sus criterios, como es el caso de algunos países africanos azotados por el Sida. Esta imposibilidad de ver la realidad, sumidos en el sueño de su ideología, se ha convertido en su verdadero verdugo.
Nuestra meta es reducirla a la única expresión que le corresponde; ser un lugar de encuentro de sus propios creyentes. No está en nuestro deseo el hacerla desaparecer, cuestión fuera de nuestras posibilidades, además que ha de desaparecer inevitablemente en el futuro, tal cual lo hicieron los mitos griego, romanos y egipcios, entre otros muchos. Pero en este momento representa un peligro fundamental, pues sabiéndose carente de todo argumento a favor, enfrentada a una ciencia que cada día la vuelve más obsoleta e incongruente, ha de acudir a cualquier medio para conservar el escaso poder que le queda.
No luchamos en contra de las religiones; luchamos a favor de la Libertad del individuo.

2006-09-06

LAS MUCHAS CARAS DEL FUNDAMENTALISMO

Por Sonia Corrêa

Desde los anos 70, cuando la revolución Iraní derrocó el Gobierno de Sha Reza Pahlavi y dejó a Ayatollah Khomeini en el poder, el mundo fue forzado a re­examinar la cuestión de la relación entre la religión y la política. El debate realizado desde entonces, en el marco de la ciencia política convencional, ha centrado su atención en los regímenes teocráticos del mundo Islámico, enfatizando que estos regímenes repre­sentan una ruptura con la tradición política moderna que separa los poderes políticos y el poder "divino". Este enfoque dejaba por fuera la creciente influencia que las fuerzas integristas religiosas empezaban a tener sobre muchos otros esta­dos que se auto definen como seculares, aún cuando sus constituciones contienen fuertes principios para garantizar la separación entre Estado y religión.

Mientras que Khomeini atraía, en el plan global, la atención de los medios como un líder del fundamentalismo Islámico, grupos integristas Pprotestantes y Ccatólicos ganaban una fuerte influencia sobre la política internacional y domés­tica de Ronald Reagan. Como resultado, desde entonces en los Estados Unidos el acceso al aborto se volvería una "anatema" y las mujeres que hacen abortos serían tratadas, crecientemente, como las "nuevas here­jes". Desde entonces se llevaron adelante ataques virulentos contra las clínicas de aborto y doctores que realizaban estos procedimientos. Varias clínicas fueron incendiadas y varios profe­sionales fueron asesinados. La posición fundamentalista de Reagan ganó mayor visibilidad inter­nacional en 1984, durante la Conferencia Internacional sobre Población en México, cuando EEUU suspendió su apo­yo al FNUAP, declarando que sus recursos eran desti­nados para la promoción del aborto.

Sin embargo, hasta la llegada de George Bush al poder, los politólogos y los medios de comunicación no dieron tanta atención a esos episodios como lo han hecho en relación al fundamentalismo Islámico. En los años 80, los efectos nefastos de las políticas de Reagan interesaron, casi exclusivamente, a los sectores involucrados con la planificación familiar y particular­mente a las feministas. Ya en 1984, la Red DAWN afirmaba en su primer libro que el fundamentalismo religioso y sus varias manifes­taciones -Islámico, Católico, Hindú, Protestante- cons­tituía una tendencia política, cuyos impactos serían de­sastrosos para las mujeres. Pasadas dos décadas, a pesar de la desatención de muchos, esta visión premonitoria se confirma dramática­mente: el fenómeno del fundamentalismo religioso se hace patente en los cuatro rincones del mundo. EI Talibán y los hechos del 11 de Septiembre, son nada más que las puntas del iceberg.

En su expresión religiosa, el fundamentalismo Islámico sentencia a muerte a las mujeres de Nigeria acusadas de adulterio. En India, lo que se denomina “fundamentalismo hindu” está en el origen de los conflictos comunitarios cuyo camino está plagado de masacres civiles. Hombres son victimas, sin duda, pero hay abusos sistemáti­cos a mujeres y niñas, como se ha visto en el genocidio de 2002 en el Estado de Gujarati. En América Latina, la jerarquía Católica y sectores protestantes movili­zan contra el uso del condón, desde hace ya algunos anos. Más recientemente la Iglesia Católica se ha dedicado a atacar el Protocolo Facul­tativo de la Convención para la Eliminación de Toda Forma de Discriminación en contra de las mujeres, afirmando que ese documento busca facilitar la legalización del aborto. En casi todos los países de la región los sectores de la jerarquía Católica, la Opus Dei y grupos evangélicos se oponen públicamente a políticas de salud sexual reproductiva y en particular, en contra los derechos de homosexua­les, lesbianas, transgéneros y travestis.

Así, como pasa en Estados Unidos, en nuestros países estas fuerzas vienen ganando poder político por la vía democrática. Procuran votos a través del control de los medios y a través de estrategias populistas, como la distribución de recursos para los pobres vía redes religiosas. En todos estos lugares donde prolifera, el fundamentalismo religioso busca enraizarse en aquellos sectores excluidos de las políticas públicas y logros económicos y especialmente entre hombres jóvenes desempleados. Sin embargo, en muchos contextos las muje­res también son protagonistas de la acción política fundamentalista, actuando como porta voces en defensa de la familia, la moralidad y la decencia.

Desde Septiembre de 2001, la "Guerra sagrada en contra el Eje del Mal” de George Bush es seguida diariamente en los medios de comunicación. Sin embargo, el público más amplio es informado sobre las políti­cas promovidas por los EEUU en el campo da la sexualidad como un elemento fundamentalista de la actual política externa de América del Norte. Esta polí­tica incluye el corte en los recursos para aquellas ONGs extranjeras que trabajan en temas relacionados con el aborto (la ley de la Mordaza), la coerción para que los programas financiados por USAID promuevan la abstinen­cia sexual como prevención del SIDA y desde el 2004, la adopción de una cláusula que obliga a los receptores de fondos del PEPFAR (programa norte-americano para combate al SIDA) a tener una posición pública contra la prostitución. El ataque a la prostitución también se manifiesta en los programa de USAID contra el tráfico y trata de personas. Desde el 2001, cualquier negociación global en las que participan los EUA ha sido negativamente afectada por esta “agenda moral”.

En este exacto momento (Mayo de 2006), cuando en Nueva York se está negociando la Declaración Política a ser adoptada por los países miembros de la ONU en ocasión de la revisión de cinco anos de la Sesión Especial de la Asamblea General para el HIV/SIDA, una de esas batallas diplomáticas está en curso. En esta oportunidad, ya no se trata solamente de que EEUU y sus aliados quieran imponer la agenda de abstinencia, de ataque a la prostitución y contra los servicios de salud sexual y reproductiva. Los países conservadores, bajo el liderazgo de EEUU, quieren impedir que el texto hable de los derechos humanos como una dimensión imprescindible de la respuesta a la epidemia y que mencione grupos vulnerables, pues en documentos anteriores esa terminología abarca a los homosexuales, trabajadoras sexuales, hombres que hacen sexo con hombres y usuarios de drogas.

Esa no es la primera vez en la historia en que el dogmatismo religioso produce atrocidades contra la sexualidad de las personas. Es suficiente retratar el efecto nefasto de la Inquisición Católica en Europa, pero también en América Latina. Historiadoras feministas han explorado a fondo sus impactos sobre la sexualidad y libertad de las mujeres. Estudios sobre la historia de la homosexualidad traen relatos dramáticossobre las hogueras en que se quemaron hombres y mujeres en España y Portugal hasta el siglo 18.

Pero no debemos hacer analogías simples. Son muy distintas y peculiares las características del fundamentalismo religioso contemporáneo. En el siglo 21 las “guerras sexuales “ – como las denomina Gayle Rubin en un texto clásico de 1984 – ya no son localizadas. Pero ocurren al mismo tiempo en muchos espacios: niveles locales en el Norte y el Sur del Ecuador y también en arenas públicas globales. Hoy se puede hablar de una intensificación de conflictos religiosos y sociales involucrando temas sobre la sexualidad.

Como subrayan Karen Armstrong y otros autores, un sesgo fundamental del fundamentalismo contemporáneo es que se presenta como una defensa de la tradición – del texto sagrado original – siendo al mismo tiempo un fenómeno totalmente moderno. Eso porque constituye una reacción a los cambios producidos por la “modernidad”, pero también porque no declinan el uso de las técnicas modernas – como los sistemas de información y comunicación – cuando se trata de diseminar sus ideas. El fundamentalismo contemporáneo está relacionado, sin duda, a las condiciones y sentimiento de incertidumbre producido por la globalización. Pero puede y debe también ser comprendido como una reacción al secularismo compulsivo que caracterizó muchas experiencias políticas a lo largo del siglo 20 y que sigue, por ejemplo, vigente aún hoy en China. Por esa razón Jaques Derrida dejó como legado la idea de que el fundamentalismo de nuestros tiempos es un retorno melancólico (y violento) de la religión.

Son, por lo tanto, múltiples y complejos los frentes conceptuales y políticos en los cuales debemos colocamos para contrarrestar los im­pactos dañinos del fundamentalismo religioso. En el marco de ese mismo desafío está la tarea crucial de reincorporar la defensa del esta­do laico en nuestras agendas políticas cotidianas. Quizás más aún: estamos frente al reto de volver a fundar las mismas bases de la laicidad que nos fue legada por las revoluciones del siglo 18.
Pero esto no es todo. Al comienzo de este nuevo milenio nos enfrentamos a otras expresiones de! fundamentalismo que, aunque no son religiosas, están caracterizadas por la intransigencia de un pensamiento o una verdad abso­luta.

Una de las expresiones más conocidas es la del "fundamentalismo del mercado". Los medios de comu­nicación atribuyen la invención de este término a George Soros, aún cuando hayan sido las economistas feministas las que han elaborado esta terminología a mediados de los anos 90. El fundamentalismo del mercado significa un apego dogmático a los principios de la economía neoliberal o, en otras palabras, la "creencia" en un Modelo Económico Único que puede y debe ser aplicado a todo el mundo. Esta "creencia" inhibe el reconocimiento de los proble­mas y las crisis que emergen de la implementación de este modelo y de las diferencias contextuales e institucionales que, en gran medida, determina la desempeño de las economías nacionales.

Finalmente, pero no menos importante, es necesario reconocer y cuestionar las manifestaciones del "fundamentalismo" que están presentes en nuestros propios campos de actuación política. Hablo de posiciones dogmáticas que hoy día pueden ser observadas en el ámbito de las políticas comunitarias y de identidad, incluidas ahí las dinámicas de la llamada política sexual. Aunque la motivación de estas expresio­nes políticas contemporáneas no sea religiosa, en muchos casos ellas reproducen pensamientos e instigan principios fundamentalistas negando el diálogo y el reconocimien­to de alternativas inherentes a las políticas democráti­cas.

Por lo tanto, al comienzo de este nuevo milenio, debemos alertar y estar atentas al fundamentalismo reli­gioso que afecta las grandes políticas y a las tentacio­nes más sutiles del fundamentalismo económico y polí­tico, teniendo en cuenta que este ultimo desafortunada­mente esta latente en nuestros propios quehaceres.

*Una primera versión de ese documento fue originalmente preparada para la revista “Bocas no Mundo, que publica La Articulación de Mujeres Brasileñas, AMB en el 2004, esa versión fue publicada nuevamente en el Suplemento Especial de DAWN Informes para el Foro Social Mundial de Mumbai..


http://www.ciudadaniasexual.org/boletin/b19/articulos.htm

Sobre la autora
Sonia Corrêa, es de Brasil y se desempeña como Co- Coordinadora del Grupo Internacional para Sexualidad y Política Social y Coordinadora de la Red DAWN para las Investigaciones en Salud y Derechos Sexuales y Reproductivos.

2006-09-05

CANSADAS DE QUE SE HAGA POLITICA RELIGIOSA, CON EL DOLOR HUMANO DE MILLONES DE MUJERES

Martes 5 de septiembre, 11:07 AM

Zaffaroni llamó a debatir con seriedad el tema del aborto

(Periodismo.com) - El juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Eugenio Zaffaroni dijo que es necesaria "una política de Estado" que afronte el problema del aborto y pidió a la sociedad que trate el tema con seriedad.

"El aborto que hay en la Argentina es el aborto de la miseria, no es el aborto de la incomodidad de la clase media, de las que tienen dos hijos y no quieren tener más", dijo el juez durante jornadas de políticas públicas en la Legislatura bonaerense.

Zaffaroni agregó: "Tenemos millones de abortos en la Argentina y tenemos que tratar [de que bajen] a cientos de miles o decenas de miles. Y no es el aborto de los países europeos, el de las chicas que no quieren tener más de uno o dos hijos. Es el aborto de la miseria, el practicado en condiciones antihigiénicas, que produce septisemias, que produce muertes".

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Domingo, 30 de Julio de 2006

REPORTAJE A CARMEN ARGIBAY, MINISTRA DE LA CORTE SUPREMA

“La Justicia no tiene nada que ver con la religión”
[…]
–Uno de los puntos más polémicos del borrador de reforma es que despenaliza el aborto en los tres primeros meses de embarazo. Su colega Raúl Zaffaroni dijo que es un error mezclar ese debate en este proyecto.

–Tiene razón, porque al incluir ese punto todo el mundo pone el foco en este tema, que provoca muchas rispideces. Genera discusiones ideológicas y religiosas. Y perjudica al resto del proyecto. La legalización del aborto en los tres primeros meses tiene que ser motivo de una discusión aparte.

Pero lo que sí se podría hacer, simplemente, es utilizar la fórmula que ya se aplicó para autorizar abortos en los casos de fetos provenientes de una violación. Ahora la ley limita esa autorización cuando se trata de una mujer idiota o demente, pero eso no tiene que ser así sino generalizarla a toda violación. Si uno lo mira desapasionadamente, esa distinción demuestra lo hipócrita que es nuestra sociedad: el problema es que una mujer idiota o demente puede tener una criatura de sus mismas condiciones y nadie se quiere hacer cargo. Entonces a ellas les permiten el aborto, a las otras no. Es un doble discurso.

–Esta semana la Cámara de La Plata ratificó un fallo que impidió realizar un aborto a una chica de 19 años violada que padece discapacidad mental. La jueza de primera instancia había invocado sus convicciones católicas.

–La Justicia que tenemos nosotros no tiene nada que ver con la religión. El Estado es laico, no puede haber cuestiones confesionales en esto.

–¿Acuerda con que la edad de imputabilidad de los menores quede en 18 años en lugar de 16?

–Eso está de acuerdo con la Convención de los Derechos del Niño, que dice que son niños hasta los 18 años.

www.pagina12.com.ar

2006-09-04

UN ESTADO QUE NO ES LAICO NO ES DEMOCRÁTICO.

ArgAtea:
Se supone que el monopolio de la creencia da para mucho, la cuestión es diferenciar los tantos y no darles
a los del vaticano el poder y la voz, desde la constitución, sobre qué es en lo que se debe creer.
Pues también estmos los ate@s que no creemos en divinidades y no somos los únicos grupos de pertenencia que construímos nuestra vida en ausencia de dioses, así el hecho que se imponga una creencia desde el Estado es una total violación a los derechos del hombre.

UN ESTADO QUE NO ES LAICO NO ES DEMOCRÁTICO.

Una fe de prácticas sensoriales

Valeria Perasso

BBC

Ya entrado el siglo XXI, ocho de cada diez argentinos se definen como religiosos, en un mapa de devociones que se entrecruzan y alimentan mutuamente.

El monopolio del catolicismo en los sectores populares está en jaque, como lo muestra la proliferación de cultos dedicados a santos paganos, que no integran el santoral oficial pero con frecuencia comparten el altar personal con otras figuras de la iglesia católica.

"Religiones híbridas", las llama el sociólogo Fortunato Malimacci, investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Argentina (Conicet).

Según este académico, la identidad argentina no es ya sinónimo de identidad católica, sino que refleja un complejo entramado de transformaciones en otros ámbitos de la sociedad que se transmiten al terreno espiritual.

Para conocer la perspectiva antropológica de este fenómeno, en BBC Mundo dialogamos con Pablo Semán, investigador de la Universidad Nacional de San Martín, y Eloísa Martín, doctorada en la Universidad Federal de Río de Janeiro. Ambos son también investigadores del Conicet, dedicados a explorar el universo de la religiosidad popular.

Desde la antropología, ¿qué es lo que define a estas formas de devoción?

Pablo Semán: La civilización a la que nosotros pertenecemos, la Occidental, se basa en la separación entre hombres y dioses. Este es un fundamento de la vida urbana y moderna.

Pero una parte de la población - en gran parte de los sectores populares, aunque no exclusivamente- no tiene un universo simbólico que presuponga la separación de los hombres y los dioses.


La posibilidad de desarrollar un perfil de santidad tiene que ver con cómo se conecta esa persona de leyenda con un lugar y una época. Es lógico que un grupo de migrantes, vinculados a tradiciones folklóricas de larga data, se identifique más con el Gaucho Gil
Pablo Semán, antropólogo

Para ellos, los milagros no son intervenciones sobrenaturales, sino parte de lo cotidiano, porque los dioses forman parte de la experiencia de vida de los devotos. Así, se sostiene una forma de creencia que no está "en el más allá" y que no es puramente espiritual, sino que se basa en milagros que obran en el cuerpo y en la cotideaneidad: en la salud, el bienestar, el dinero, el sexo...

Este parece ser un fenómeno que se define a través de lo popular como una cuestión de clase...

Eloísa Martín: Sí, tradicionalmente la religiosidad popular ha sido definida a partir de su contraposición con la Iglesia católica, sobre todo en los países de América Latina, o bien como la religiosidad de los más pobres, en oposición a la religión de las clases medias o dominantes.

Los devotos son mayoritariamente de clases populares porque es una práctica que se aprende en el seno de la familia, y eso se da más en las clases bajas o medias-bajas. Pero en realidad tiene poco que ver con la iluminación "intelectual", diríamos, y con la división de clases.

PS: Es un universo simbólico diferente, no quiere decir que sean menos educados. Los devotos de los santos populares presuponen que el mundo de sus cosas está integrado a la acción de los dioses. En la religiosidad popular este vínculo hombre-dioses, que rompió la Modernidad, está intacto.

¿En qué difiere el modelo de santidad que proponen figuras como la Difunta Correa, el Gaucho Gil o Gilda, y el que rige a los santos de la Iglesia católica?

PS: La posibilidad de desarrollar un perfil de santidad tiene que ver con cómo se conecta esa persona de leyenda con un lugar y una época determinados. Se presenta un personaje que es verosímil , y por eso puede obrar como un agente que hace intervenir a las fuerzas divinas en la vida cotidiana.

EM: El principal foco de interés está en el milagro, que no necesariamente es entendido como algo extraordinario. Puede ser curarse de cáncer, pero también pasar de año en el colegio, no perder el trabajo o mantener a la familia unida.

La "consagración" de estos santos se da a partir de los relatos de milagros, que se repiten una y otra vez, y que dan cuenta no sólo del poder del santo para obrar en el mundo de los vivos, sino también de la fe de otros devotos, lo que funciona como elemento convalidante de los poderes milagrosos del personaje.

¿Y qué importancia tiene el "elemento trágico", que todos estos santos comparten, en la narrativa de santidad?

EM: La muerte trágica es considerada como una ruptura en el ciclo natural y, a partir de ese punto, se hace posible la entrada del poder sagrado en el mundo de los vivos. Para los creyentes católicos, todos los muertos son capaces de obrar en el mundo de los vivos, pero éstos que mueren trágicamente se acredita que pueden actuar en ciertas áreas en las que eran "especialistas" antes de morir, o que tienen que ver con las razones por las cuales murieron.

Gilda, por ejemplo, en las cuestiones artísticas, porque era cantante, y en el amor, porque tuvo una vida amorosa complicada. El Gaucho Gil, en cuestiones de justicia, aunque no necesariamente una justicia entendida como lo hace el catolicismo.

La religiosidad popular puede ser definida como la "religión de la inmediatez", como la llamó el estudioso católico Lluis Dulch, quien veía en las formas populares de la fe una práctica expresada a través de lo sensorial. ¿Cómo se refleja esto en el culto?

EM: Son cultos en los que lo corporal tiene gran importancia: se tocan las imágenes, se expresa con el cuerpo a través del baile, se usa la mediación de objetos materiales que representan el vínculo con el santo... Hay música, color, y toda una serie de estímulos sensoriales.

PS: La leyenda que construye la supuesta santidad de estas figuras determina las características del culto. Por ejemplo, el del Gaucho Gil es muy festivo, refleja la tradición musical de la región y se le pueden pedir cosas que tienen que ver con la masculinidad. El de la Difunta, en cambio, es más lúgubre y angustiante, y se le piden favores relacionados con la maternidad.

Y la otra dinámica importante es la de la reciprocidad: yo le pido algo al santo y le tengo que dar algo. Esto, para aquellos que piensan que el único intercambio con la divinidad es a través de la palabra, hace ver a la religiosidad popular como mágica.

Muchos opinan que la crisis socio-económica que afectó a Argentina en 2001 actuó como elemento clave para expandir estos cultos. ¿Creció el número de devotos, o sólo se hizo más visible?

PS: Creo que se trata de una mayor visibilidad: porque la sociedad se volvió más democrática y este modelo de religiosidad tan diferente al de las clases medias llama la atención, y también porque en el Gran Buenos Aires hay una población relativamente nueva, una nueva camada de migrantes que llevó el culto desde sus provincias de origen hasta el llamado conurbano.

Las clases medias no tienden a pensar que las cosas se causan por un determinismo divino, mientras que las clases populares sí. Por eso, si hay más problemas, hay más recurso a la divinidad, y lo que nos gusta llamar "crisis" le dio más motivos de expresión a esa visión cosmológica.

EM: La crisis también se verifica en el tipo de cosas que las personas piden. Desde el 2001 se hacen pedidos especialmente por la patria... Pero éstos están englobados dentro de las experiencias cotidianas de las personas, porque si el país está bien, todo el resto se va a ir dando: trabajo, salud, bienestar, etcétera.


La política de la Iglesia argentina depende de cada diócesis, que no tiene que ver con lo que ocurre a nivel provincial o nacional. En algunos lugares se fomenta el culto a los santos paganos y desde ahí se trata de evangelizar, como ocurre en Corrientes con el Gaucho Gil
Eloísa Martín, antropóloga

Y los medios han jugado un papel fundamental: se ocupan más de reflejar este fenómeno, que pasa de ser presentado como un producto de la ignorancia, a ser una manifestación legítima de la cultura popular.

¿Qué importancia tiene el lugar de culto, sobre todo los santuarios junto a las rutas, en la difusión de estas expresiones de fe?

EM: Los santuarios son puntos de llegada de peregrinaciones. El santuario es un cruce del tiempo y el espacio: el tiempo marcado por festividades y peregrinaciones regulares, y el lugar donde murió el santo, donde se dio el pasaje de la vida a la muerte. Por eso se acredita que en ese lugar el pedido que el devoto hace al santo tiene más fuerza.

Y también son espacios de encuentro donde se comparten historias, y se refuerza la fe del devoto al compartirla con sus pares.

La Iglesia católica ha ido redefiniendo su posición ante estos fenómenos. ¿Creen que puede haber un acercamiento mayor, sobre todo si atendemos a que estos devotos de santos no oficiales se definen a sí mismos como católicos?

PS: Bueno, el catolicismo funciona mucho más allá del Papado, y siempre hay disputas entre lo que dice Roma y lo que hacen los católicos. La iglesia debe negociar permanentemente la definición de lo que es católico con cada una de las poblaciones donde se implanta, lo que diversifica enormemente al catolicismo, más allá de que éste tenga pretensiones de uniformidad universal. Así ocurre en todos los países de América Latina y de Africa donde hay catolicismo.

La mayor tolerancia del catolicismo actual se refleja, por ejemplo, en el proceso gradual de reconocimiento que ha tenido el movimiento carismático dentro de la Iglesia. Indirectamente, la legitimación de los carismáticos beneficia el culto a estos santos, porque muchos de sus principios son similares.

Nota de BBCMundo.com:
http://news.bbc.co.uk/go/pr/fr/-/hi/spanish/specials/2006/rituales_de_la_ruta/newsid_5006000/5006406.stm

2006-09-02

SEREMOS MUJERES AUNQUE AL VATICANO LE PESE

ArgAtea:

DESDE EL VATICANO
"Según el Derecho Canónico, "quien procura el aborto, si éste se produce, incurre en excomunión (automática) latae sententiae", sin necesidad de la intervención de un tribunal eclesiástico.
"

DESDE LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD:

A pesar del notable aumento de uso de anticoncepción en las últimas tres décadas, se estima Que 40-50 millones de abortos ocurren anualmente, cerca de la mitad en circunstancias Inseguras.

Globalmente, alrededor del 13% de todas las muertes maternas se deben a complicaciones de abortos inseguros. Además de las 70.000 mujeres que mueren por año, decenas de miles sufren consecuencias a largo plazo, incluyendo infertilidad.

Aun donde existe amplio acceso a la planificación familiar, los embarazos ocurren como consecuencia de fallas en la anticoncepción, dificultades con su uso, falta de uso o a causa de un incesto o violación.

El embarazo puede representar una amenaza para la vida de la mujer o para su salud física y mental. Reconociendo estas circunstancias, casi todos los países del mundo han aprobado leyes que permiten interrumpir un embarazo bajo ciertas condiciones.

En algunos lugares el aborto es legal sólo para salvar la vida de la mujer; en otros el aborto se permite a requerimiento de la mujer.

Los sistemas de salud necesitan dar respuesta a las distintas circunstancias. El papel de la Organización Mundial de la Salud es desarrollar normas y estándares y asesorar a los estados miembros de manera tal de fortalecer la capacidad de los sistemas de salud. Por más de tres décadas, la OMS ha asistido a gobiernos, agencias internacionales y organismos no gubernamentales en la planificación y entrega de servicios de salud materna, incluyendo el manejo de las complicaciones del aborto inseguro y la provisión de servicios de alta calidad en planificación familiar.

En la Sesión Especial de la Asamblea General de las Naciones Unidas, desarrollada en Junio de 1999, los Gobiernos acordaron que “en circunstancias donde el aborto no sea ilegal, los sistemas de salud deben entrenar y equipar a los proveedores de los servicios de salud y tomar otras medidas para asegurar que los abortos sean seguros y accesibles. Deben tomarse medidas adicionales para salvaguardar la salud de las mujeres.”

Este documento provee una guía para transformar ese compromiso en una realidad:

http://www.who.int/reproductive-health/publications/es/safe_abortion/text_es.pdf

PARA LA SOBERBIA DE BERGOGLIO, HAY QUE DARLE DE BEBER LOS BREBAJES DE CHAMBERLAIN

ArgAtea: Quién puede asegurar que a los de ciertas religiones, les interese realmente el hombre?
Tal parece los sistemas que no son, por y para el hombre, a la vida del hombre la consideran imprescindible y no tiene ningún significado, entonces la soberbia e hipocresía será tal que siempre recurriran al engaño y no dudarán en prometer una ilusión, imposible de demostrar.

El ejemplo en nuestro país es sobre la legislación del aborto, las creencia y el engaño de una vida después de la muerte, hace que no les importe a los del clero, el dolor que pueda sufrir un humano.

"Es notable ver a quienes durante siglos han exhortado a los hombres a aminorar en sí el sentimiento de las diferencias,[...] dedicarse a dejar de marcar las diferencias que enfrentan."


Los brebajes de Chamberlain

Ago-24-06 - por Rodolfo Pandolfi
Pocas personas, sobre todo cuando son jóvenes, creen que van a morir. Al mismo tiempo, la gran mayoría de la gente –una encuesta habla más del 80% de quienes tienen menos de 50 años -no creen que la vida tenga sentido, que sea algo más que una pasión inútil, como decían los viejos existencialistas.
No es una casualidad que el más talentoso de los filósofos nazis, Martín Heidegger afirmara que "el hombre es un ser para la muerte".
Si el hombre es un ser para la muerte y la vida no tiene sentido, poco interesa que se asesinen judíos, que se linchen negros, que reaparezca la esclavitud con una ferocidad asombrosa.

El Islam fundamentalista no tiene ningún ideal posterior a la Edad Media. No cree en la felicidad humana, ni en el diálogo, ni en el liberalismo, ni en los derechos humanos, ni en el socialismo. Piensa que la vida, esa pasión inútil, se justifica a través de la muerte y en primer lugar de la propia muerte. Es una idea tremenda de autoculpabilidad, como si morir asegurase las delicias del cielo. Parece imposible luchar contra alguien que quiere ser destruido, ganarle a quien busca perder, ser convincente, racional, apaciguador, con los fanáticos.

Si llega la tercera guerra mundial, una posibilidad fuerte pero que nadie quiere conocer, la lucha será muy despareja. Sin embargo, la victoria de la cultura occidental, judía y cristiana es una certeza. El arma secreta de los japoneses fueron los kamikases, pero perdieron. Cierto cine francés emocional buscó profundizar la sensibilidad de los países democráticos con la trágica historia de Hiroshima. Una película típica de la guerra fría y que hoy se sospecha fue, en parte al menos, financiada por la URSS.

Muy pocos conocen que la guerra atómica surgió de las entrañas mismas del nazismo, que la preparaba en sus túneles, que luego algunas de esas bombas pasaron a Japón y que según documenta Paul Johnson, el gran historiador católico de Gran Bretaña, hubo seis ataques atómicos a Estados Unidos, que fracasaron por la situación estratégica general, la enorme distancia que obligaba a extender el recorrido con globos, el atraso tecnológico.

Pero el fracaso no es una virtud y las bombas sobre Hiroshima y Nagasaki pueden haber ahorrado más de dos millones de muertos japoneses.

El Japón fanático y fundamentalista se rindió, aunque en sus libros de texto se sigue enseñando el rencor. También se desmoronaron otros fundamentalismos, porque la muerte pone todas sus esperanzas en la muerte y no en la producción cultural, la persuasión racional, la comunicación, la protección de los habitantes.

Georges Bush es una figura muy discutible. Llegó por primera vez al poder en comicios sospechados, pero fue reelecto por abrumadora mayoría pese a tener más del 90% de los medios en contra. En Estados Unidos existen voraces monopolios, ricos aberrantes -aunque no en la misma medida que en China Comunista donde deben estar con frac quienes ingresan a las grandes bolsas de Pekín y de Shangai-, hubo muchos negros aplastados contra quienes siguen pesando prejuicios, pero es quizás el país menos racista del mundo, menos discriminador y una mujer negra y pobre, nacida en Bronx, desorienta con sus conocimientos y su percepción de la realidad, abonada con cinco títulos universitarios. Sucede a un general negro y rico, también de fastuosa cultura, que antes comandó a los ejércitos de los Estados Unidos, nada menos.

Si el odio a USA justifica todo, inclusive la alianza con el nazismo, ahora a los crimines cometidos por los fanáticos fascistas del Islam, el progresismo tendrá que buscar la forma de compatibilizar su opción con la idea, que aún no han abandonado, sobre la perversidad de Adolf Hitler. Ya hay un periódico argentino –un site, en realidad- perteneciente a un grupo terrorista que predica la paz y la alianza con todos los enemigos de Estados Unidos, sean de extrema derecha o de extrema izquierda, para reunir fuerzas.

Hebe Bonafini, compañera y amiga del Presidente de la Nación, es un paradójico ejemplo en ese sentido: es ferviente admiradora del dictador venezolano, general Hugo Chávez y de los genocidas de Bali, de Sudán, de Argelia y de todos los países a los que ama porque odian en su misma sintonía.

¿Cómo puede ser que el anticuado progresismo al uso, tan igualitario, se enganche con los destructores de la dignidad de la mujer, con los enemigos de la cultura, con los monaguillos de una intolerancia llevada al absurdo, con los partidarios del miedo?.

No son románticos, ni bucólicos, ni naturalistas, sino personas que repiten hoy en forma explícita, el Viva la Muerte de Millán de Astray. Los Saramango, los Chomsky, han traicionado su tarea como intelectuales. Los incendiarios de bibliotecas, quienes prohíben religiones e ideologías disidentes, están vetando todas las posibilidades de amor humano y de cariño hacia los próximos, la propia familia.

Pilar Rahola dice que para los fundamentalistas islámicos los partidarios de Israel no se preocupan por los musulmanes muertos.

La CNN dedica mucho tiempo a mostrar a un chico con diversas madres, llorando en el Líbano. La escena aparece en los intervalos de la publicidad en favor de López Obrador.

Los muertos musulmanes que también deben interesar son el millón de desaparecidos por manos integristas en el Sudán, sin que se conozcan reclamos de los jueces derechos y humanos con jurisdicción planetaria. A los amigos de Israel también le preocupan los 20.000 masacrados por Afees El Asad, los 100.000 tragados por la tierra en Argelia, los muertos en Marruecos, el asesinato masivo de católicos en el Líbano, el Septiembre Negro de Jordania, la masacre de Munich, la AMIA, la celebradísima destrucción de las Torres Gemelas, la Shoá misma, el exterminio de kurdos por Hussein, que se dedicaba a cazar y matar comunistas pero ahora parece que es de izquierda.

La traición de muchos intelectuales y periodistas es inaudita. Desde ese campo no se oyen, casi, quejas por la castración de las mujeres, ni una observación por el superCromagnón de Bali, donde los chicos y las chicas bailaban en situación de pecado, según los fanáticos.

Torquemada se sonrojaría humillado ante la nueva Inquisición, pero nadie lo ha incorporado, hasta ahora, al campo progresista.

Ante los kamikaze islámicos y sus aliados es imposible una política de apaciguamiento. Atila, el rey de los hunos, dialogó y se dejó convencer por el Papa para que no destruyera a Roma pero es terrible encontrarse ante quien se niega a dialogar.

Neville Chamberlain hizo la prueba. Después de hablar con Adolfo Hitler volvió a Londres con un trozo de papel firmado, según creía, para salvar la paz por una generación. El acuerdo de Munich entregó Checoslovaquia a las fieras en la misma época en que el gobierno de Londres se rendía también ante Francisco Franco y lo reconocía como autoridad legal. Un gran conservador, Winston Churchill, rojo de indignación, clamó en la Cámara de los Comunes: Vergüenza, Vergüenza. Para no perder tiempo, José Stalín se alió entonces a Hitler y entre ambos se dividieron Polonia. El primero de octubre de 1939, el gobierno soviético cantó loas a la acción conjunta con los alemanes. Cuando comprendió que era un error, ya resultaba demasiado tarde.

Chamberlain tuvo su momento de gran popularidad, pero cuando las bombas y luego los cohetes comenzaron a demoler Londres el pueblo dejó de amarlo.

Existió una Europa cobarde, apaciguadora, luego brotó la Europa de los maquis y de los partisanos, pero la indiferencia general de estos días, cuando no la complicidad, de Occidente lleva el sello de Chamberlain.

Los crímenes fundamentalistas, como los cometidos en Sudán, en Bali, en Atocha, en Nueva York o en Londres, buscan ser explicados muchas veces a través de la diversidad cultural, lo que quiere decir al fin y al cabo que ellos pueden matar porque son incapaces de dar la batalla cultural, porque están atrasados, y merecen compasión.

Hay pueblos que tienen prohibido, desde el punto de vista ético, el genocidio, la censura de libros, la esclavitud, el aplastamiento de las mujeres, la utilización de los niños como bombas humanas, y hay países en guerra que no pueden interceptar las comunicaciones telefónicas de sus enemigos. Esa soberbia de intelectuales y juristas occidentales es del todo cobarde y consiste en absorber los brebajes de Chamberlain.

Ahora existe cierta desilusión por las debilidades de Saramango, de Gunther Grass, de Bertolt Bretch, de otros. Lastiman sus contradicciones, pero entre los intelectuales es común ser dulces humanistas cuando pueden y perros falderos cuando no pueden.

Al considerar al fanatismo islámico como un dato peculiar de la diversidad se incurre en una terrible discriminación antiarabe, se finge que los musulmanes no llegan a diferenciar el bien del mal. Esta glorificación del particularismo es asombrosa en aquellos a quienes les corresponde ser los intelectuales por excelencia: los hombres de la Iglesia. Es notable ver a quienes durante siglos han exhortado a los hombres a aminorar en sí el sentimiento de las diferencias, para aprehender la Divina Esencia que los reúne a todos, dedicarse a dejar de marcar las diferencias que enfrentan.

Considerar inimputables a unos y justiciables a otros, según su origen o cultura, es una de las formas mas pedantes del racismo, es una manera de usar el paraguas de Chamberlain.